Fuente: eleconomista
En los últimos tres siglos, el grupo ha pasado de enviar las cartas en diligencia a convertirse en el proveedor logístico de los gigantes online Amazon y Alibabá.
En los últimos tres siglos, el grupo ha pasado de enviar las cartas en diligencia a convertirse en el proveedor logístico de los gigantes online Amazon y Alibabá.
El pujante desarrollo
del comercio online marca la transformación y el futuro del
Grupo Correos. La sociedad pública
cumple 300 años con el reto de convertirse en "el mejor proveedor de
servicios de paquetería del mercado", una labor épica, debido a la
fuerte competencia, que marcará la enésima metamorfosis de la compañía estatal
que, desde su nacimiento en 1716, se
ha visto obligada a cambiar, apostar por las nuevas tecnologías y
diversificarse para sobrevivir y seguir siendo útil a la sociedad.
El último paso dado por
Correos, que en el siglo XIX pasó de la diligencia a los trenes correo para
llegar a todos los pueblos, ha sido el desembarco en el mundo digital. En 2013,
ante el desplome del servicio tradicional del envío de cartas (ha pasado de
6.000 millones de envíos en 2003 a 3.000 millones en 2015) y la entrada en
números rojos, el grupo puso en marcha
un plan de acción para "impulsar su diversificación y transformación",
tal y como aseguró en su día la firma que preside Javier Cuesta Nuin. Los
primeros años de este plan estratégico, que implicó una reestructuración de la
compañía, permitió a Correos lograr beneficios.
El objetivo principal del Plan 100-300-1.500, que
concluye a finales de este año, era claro: buscar nuevas vías de ingresos. Y para ello la firma decidió apostar por la paquetería asociada al
comercio online y por el servicio de correo digital, que
todavía es un proyecto piloto bautizado
como eCorreos. Por un lado, la firma estatal se ha posicionado en toda la
cadena de valor del comercio electrónico, apostando por la creación de una
tienda online para que las pequeñas y medianas empresas puedan exponer y vender
sus productos a través de Internet y por convertirse en uno de los principales
proveedores logísticos para el reparto de paquetes pequeños a particulares y
empresas.
Esta vocación, que les
obligó a implantar la gestión automática de paquetería, les ha llevado a
convertirse en el proveedor logístico oficial en España de los gigantes del
comercio digital Amazon y la china Alibabá. "Entre 2013 y 2014 el volumen
de reparto de paquetes ha crecido entre un 25 y un 30 por ciento gracias al
comercio online. Es nuestra apuesta de futuro y si mantiene los ritmos de
crecimiento no se descarta volver a contratar gente", explicaron a este
diario fuentes del Grupo Correos.
La otra línea de
crecimiento es el desarrollo de los servicios digitales nativos. Es decir,
convertirse en el tercero de confianza de las comunicaciones digitales, un
papel que ya tienen en las comunicaciones físicas al ser el notario que da fe
de que una persona haya recibido la comunicación correctamente. También
trabajan para crear una especie de nube donde la personas puedan guardar toda
la correspondencia oficial y personal. El buzón en la nube también permitirá
tramitar comunicaciones oficiales.
Los orígenes
Pero, hasta llegar a
convertirse en una pieza clave del desarrollo del comercio online en
España, Grupo Correos ha pasado por decenas de transformaciones en los 300 años
que lleva de vida como servicio público. Y es que, tras invertir gran parte del
siglo XVIII en crear el cuerpo profesional de carteros y de instalar buzones en
las calles, en 1850, Correos decidió dar un paso adelante para agilizar la
gestión y el cobro de los envíos de la correspondencia y estableció el sello
como la forma de pago previo al tiempo que creó su primera flota propia de
transporte por carretera. El primer sello se imprimió con el perfil de la reina
Isabel II.
Apenas cinco años
después, Correos introdujo los servicios telegráficos de la mano del telégrafo
eléctrico en España y, en 1884, se volvió a poner a la vanguardia de las
comunicaciones al encargarse del primer servicio de teléfono público en nuestro
país, tras varios años de experimentos. Dos años antes, en 1882, tuvo otro
gesto de modernidad y transformación al ser de los primeros en incorporar
mujeres a su plantilla, en concreto al servicio de Telégrafos.
Correos entró en el
siglo XX con el desarrollo de nuevas líneas de negocio que permitieron conectar
más a las personas y desarrollar modelos de negocio. Así, diseñaron nuevos servicios
como el envío de cartas urgentes, los giros (envíos de dinero) y los reembolsos
(formas de pago), así como los servicios bancarios a través de la Caja Postal
de Ahorros. En 1918 crearon el primer servicio aeropostal en España y en 1962
llegaron los buzones domiciliarios. Para agilizar el servicio postal, que cada
vez estaba más masificado, en 1981 idearon el código postal como fórmula para
clasificar automáticamente la correspondencia y, finalmente, en 1998 estrenaron
su primera página web.
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