¿Te ha conmocionado la imagen del
cadáver del niño sirio en la playa? ¿Crees que Europa no está haciendo lo suficiente por los cientos
de miles de refugiados sirios? No hace falta pedir responsabilidades a los
políticos para que actúen: nosotros
mismos podemos aportar una valiosa ayuda. Ya sea con una donación económica u ofreciéndonos
como voluntarios, cualquier aportación es buena para poder parar este desastre
humanitario. Estas son
algunas de las organizaciones que están trabajando sobre el terreno en Siria.
Abdullah Kurdi, padre de Aylan Kurdi, el niño muerto en la playa, espera en el depósito de cadáveres a su familia …
Save the Children: Esta organización trabaja dentro y fuera de Siria, en campos de refugiados deIrak, Líbano, Egipto y Jordania. Está distribuyendo materiales básicos entre los refugiados, dando alimentos y apoyando la educación.
Cruz Roja: La organización aporta ayuda médica en los campamentos de refugiados y distribuyó el año pasado 1,9 millones de raciones de comida entre los desplazados.
ACNUR: proporciona agua, tiendas de campaña y cuidados médicos a los refugiados. El 95% de lo donado está destinado a ayuda humanitaria, y el 5% restante, ha gastos de la organización.
Oxfam Intermón: durante 2014, ha atenido a casi medio millón de refugiados en Jordania y el Líbano proporcionando agua potable, mantas y estufas, así como utensilios para la higiene.
UNICEF: trabaja dentro de Siria y en los países vecinos desde el inicio del conflicto proporcionando suministros de emergencia, agua potable, servicios de salud, educación y protección.
ONG RESCATE: Distribución de cestas de alimentos básicos entre las víctimas del conflicto, y junto a esto y trabajo de apoyo a las mujeres.
Comisión Española de Ayuda al Refugiado: Acogida a solicitantes de protección internacional, refugiados, desplazados y beneficiarios de otras formas de protección subsidiaria y apátrida en situación de especial vulnerabilidad psicológica, física y/o social.
Medicos Sin Fronteras: En un principio, Médicos Sin Fronteras (MSF) se centró en la atención urgente y la cirugía traumática en el norte. A medida que la situación se deterioraba, las actividades se fueron ampliando: atención primaria, salud materna, salud mental y campañas de vacunación contra el sarampión. MSF también donó suministros y medicamentos para enfermedades transmisibles como el tifus, afecciones crónicas como el asma y la diabetes, y patologías cardiovasculares y renales.
Caritas: Distribución de ayuda humanitaria básica (alimentos, material de
refugio, mantas, artículos de higiene, combustible para calefacciones…) y
asistencia médica y psicosocial, para los desplazados internos, los refugiados
en otros países y las grupos de personas más vulnerables.
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